Antiguamente en las culturas prehispánicas predominaban las expresiones artísticas; de hecho, los trabajos en el campo estaban acompañados de música y cantos.
De otro lado, las diversas tradiciones y costumbres han perdurado a través del tiempo y fueron determinantes del rico desarrollo del folclor peruano de ese entonces.
Así, en la actualidad, las manifestaciones musicales (danzas y canciones), las fiestas populares, la artesanía, la gastronomía y otras actividades (que varían según la región) son importantes expresiones del patrimonio cultural peruano y latinoamericano.
Los músicos andinos utilizaban los instrumentos de viento, como la quena el pinkillo, el erke, la antara o siku (zampoña), el pututo y otros como la tinya (tambor de mano), las pomantiyas (hechas de piel de puma) y las runatinyas (hechas de piel humana).
Con la conquista española llegaron también arpas, guitarras, vihuelas, bandurrias, laúdes, etc., de los que surgieron instrumentos mestizos como el arpa y el charango, cuya caja es fabricada con la caparazón del armadillo.
El mestizaje cultural también recibió el aporte africano de los esclavos. Esta influencia es visible en el festejo, la zamacueca, etc.
Entre las danzas de origen nativo predominan las relacionadas con el trabajo del campo, la caza y la guerra, algunas coreografías muestran cierta influencia cristiana. Dos de las danzas más importantes son la kashua, que suele bailarse grupalmente en el campo o en espacios abiertos, y el wayño o huayno, que se baila en parejas y en espacios cerrados. También son de origen andino el yaraví y el triste (canciones sentimentales).
Las danzas de carácter ritual son el achocallo, la pinkillada, la llamerada (imita el andar de las llamas), la kullawada (de las hilanderas), etc. Entre las danzas de la caza pueden mencionarse las denominadas llipi-pulli y choq'elas (relacionadas con la cacería de la vicuña).
Como danzas de guerra podemos mencionar el chiriguano, de origen aimara; el chatripuli, que satiriza a los soldados españoles, y el kena-kenas, referente a los soldados chilenos que ocuparon el Perú durante la guerra del Pacífico. Cabe mencionar las danzas del carnaval, fiesta que coincide con la época de cosechas.
La danza amorosa peruana más vistosa y conocida internacionalmente es la marinera norteña, que representa el galanteo de un hombre a una joven. Existen variantes de esta danza en Lima y otras regiones del país.
Las fiestas populares, reúnen música, danzas, comidas y bebidas típicas. Además de las fiestas religiosas, como la Navidad, el Corpus Christi o Semana Santa, hay otras como las ferias de las alasitas (palabra aimara que significaría "cómprame") que combina una feria de artesanías con bailes, comidas y una misa; o la peregrinación del Q'oyllor-riti (Culto a los Apus).
Entre las artesanías más difundidas en el Perú tenemos la cerámica, el tallado, la platería, el repujado de cueros, el tejido en paja, y la textilería, que destacan los coloridos tejidos en lana de alpaca.
De otro lado, las diversas tradiciones y costumbres han perdurado a través del tiempo y fueron determinantes del rico desarrollo del folclor peruano de ese entonces.
Así, en la actualidad, las manifestaciones musicales (danzas y canciones), las fiestas populares, la artesanía, la gastronomía y otras actividades (que varían según la región) son importantes expresiones del patrimonio cultural peruano y latinoamericano.
Los músicos andinos utilizaban los instrumentos de viento, como la quena el pinkillo, el erke, la antara o siku (zampoña), el pututo y otros como la tinya (tambor de mano), las pomantiyas (hechas de piel de puma) y las runatinyas (hechas de piel humana).
Con la conquista española llegaron también arpas, guitarras, vihuelas, bandurrias, laúdes, etc., de los que surgieron instrumentos mestizos como el arpa y el charango, cuya caja es fabricada con la caparazón del armadillo.
El mestizaje cultural también recibió el aporte africano de los esclavos. Esta influencia es visible en el festejo, la zamacueca, etc.
Entre las danzas de origen nativo predominan las relacionadas con el trabajo del campo, la caza y la guerra, algunas coreografías muestran cierta influencia cristiana. Dos de las danzas más importantes son la kashua, que suele bailarse grupalmente en el campo o en espacios abiertos, y el wayño o huayno, que se baila en parejas y en espacios cerrados. También son de origen andino el yaraví y el triste (canciones sentimentales).
Las danzas de carácter ritual son el achocallo, la pinkillada, la llamerada (imita el andar de las llamas), la kullawada (de las hilanderas), etc. Entre las danzas de la caza pueden mencionarse las denominadas llipi-pulli y choq'elas (relacionadas con la cacería de la vicuña).
Como danzas de guerra podemos mencionar el chiriguano, de origen aimara; el chatripuli, que satiriza a los soldados españoles, y el kena-kenas, referente a los soldados chilenos que ocuparon el Perú durante la guerra del Pacífico. Cabe mencionar las danzas del carnaval, fiesta que coincide con la época de cosechas.
La danza amorosa peruana más vistosa y conocida internacionalmente es la marinera norteña, que representa el galanteo de un hombre a una joven. Existen variantes de esta danza en Lima y otras regiones del país.
Las fiestas populares, reúnen música, danzas, comidas y bebidas típicas. Además de las fiestas religiosas, como la Navidad, el Corpus Christi o Semana Santa, hay otras como las ferias de las alasitas (palabra aimara que significaría "cómprame") que combina una feria de artesanías con bailes, comidas y una misa; o la peregrinación del Q'oyllor-riti (Culto a los Apus).
Entre las artesanías más difundidas en el Perú tenemos la cerámica, el tallado, la platería, el repujado de cueros, el tejido en paja, y la textilería, que destacan los coloridos tejidos en lana de alpaca.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario